Uso de equipamiento de protección personal (EPP) del personal de apoyo

El uso de EPP dependerá de la política de las autoridades de salud pública local y/o gubernamentales y en particular puede verse influenciado por la prevalencia del COVID-19 en la comunidad

En el rugby, la preocupación principal es que el contacto cercano crea riesgos de transmisión. Para evaluar este riesgo podemos evaluar la probabilidad de encontrar una persona infectada en un grupo de personas que están juntas a los efectos de entrenar y practicar el deporte,

Esta probabilidad variará en diferentes países, pero es una función de dos factores:

  1. cuántos casos activos hay en esa comunidad o región en cuestión (la prevalencia)
  2. El tamaño del grupo al que la persona está expuesta donde un aumento de tamaño aumenta el riesgo de exposición y, por lo tanto, de transmisión.

Por ejemplo, si la prevalencia de casos activos es baja (como es el caso de Nueva Zelanda y Australia), entonces la probabilidad de exposición a un caso activo y, por lo tanto, la transmisión es muy baja. Por lo contrario, países, regiones, comunidades o clubes donde la prevalencia de casos es mayor, tienen una probabilidad naturalmente mayor de encontrar un caso tan activo dentro de un grupo de personas de cualquier tamaño.

Por lo tanto, recomendamos a cada Unión, Competición y Club que evalúe su propia prevalencia y la probabilidad resultante de exposición a un caso activo de COVID-19. Esta probabilidad puede ser luego utilizada para informar los requerimientos de EPP, con mayor probabilidad de exposición o de encontrar un caso que necesite un requisito más riguroso de EPP para el personal médico.

World Rugby ha desarrollado un calculador para ayudar a evaluar la probabilidad (dada la prevalencia de la enfermedad) de que un individuo infectado se encontraría en un grupo aleatorio de 50 personas provenientes de una comunidad determinada (una cifra arbitraria para representar a un plantel típico de rugby y esta cifra puede ser modificada para determinar cómo se ve afectado el riesgo de exposición). Por ejemplo, el 25 de junio, la probabilidad de una exposición aleatoria a una persona infectada en el Reino Unido es el 12,1%, en Italia es del 9,0%. Con el tiempo, a medida que la cantidad de casos activos disminuye en estos países, la probabilidad disminuye y se espera que sea del 8,6% y del 5,6% el 22 de agosto, para el Reino Unido e Italia, respectivamente.

Usando la fuente de datos de casos activos o infecciones activas estimadas usted puede calcular la probabilidad de que se encuentre una persona infectada en una muestra aleatoria de 50 personas en su país/región aquí:

Las cantidades utilizadas en los ejemplos arriba son estimadas y la probabilidad calculada variará dependiendo de la capacidad de identificar con precisión la prevalencia en la comunidad en cuestión. Sin embargo, este calculador de probabilidades puede contribuir a proporcionar una guía para planificar el uso de EPP en competiciones y entrenamientos. El Reino Unido es un buen ejemplo de un país que está saliendo del cierre total comenzando las actividades del deporte de elite pero que aún tiene altas tasas de transmisión comunitaria. Los grupos de deportes de elite en el Reino Unido han preparado un documento describiendo el EPP requerido para su uso en su jurisdicción, adjunto aquí. Cuando un país tiene una prevalencia de enfermedad alta el uso de EPP nivel I, II o III (figura 3) puede ser necesario.

Figura 3: Ilustración del Equipamiento de Protección Personal (reproducido y adaptado con permiso de Hodgson y colaboradores. Atención de emergencia al costado de la cancha y equipamiento de protección personal: un esquema para el deporte de elite en la pandemia COVID-19)

Se debe tener la precaución de proteger no solo a los jugadores sino también a los oficiales de partidos y al personal. Los siguientes lineamientos deben considerarse en las instalaciones y en ocasión de jugarse partidos.

Para los países con menor prevalencia de la enfermedad, el EPP nivel 1 puede ser suficiente para médicos y fisioterapeutas al costado de la cancha y en la cancha y al aumentar las probabilidades se debería subir el nivel de EPP utilizado.

Las Uniones, Competiciones y Clubes deben comunicarse con las autoridades de salud pública y/o gubernamentales para analizar la prevalencia de la enfermedad y determinar el nivel de EPP más apropiado y que garantiza el cumplimiento de las políticas locales.

En las instalaciones de los Clubes:

  • Es recomendable el uso de máscaras por parte de todos (jugadores, personal de apoyo y entrenadores) en las instalaciones cuando no se entrena. En la enfermería la combinación de distanciamiento social cuando sea posible y uso de máscaras ayudará a reducir el riesgo de un contacto prolongado entre los jugadores y el personal. Las Uniones, Competiciones y Clubes deben ser aconsejados por las autoridades de salud pública local y/o gubernamental. Cuando el uso de máscaras sea obligatorio en el transporte público, el uso en las instalaciones del equipo es probable que sea fuertemente recomendable.
  • Durante los partidos se debe considerar lo siguiente: Puede ser aconsejable el uso de máscaras para el personal médico al costado de la cancha particularmente si el personal médico no es full time y trabaja en la práctica lejos de la instalación
  • Cuando la transmisión comunitaria de la enfermedad y la alta prevalencia de la enfermedad están presentes cuando los equipos retornan a los partidos y el personal tiene un mayor riesgo de exponer a otros o de exponerse a personas infectadas o sintomáticas:
    • World Rugby recomienda que se realicen todos los esfuerzos (exámenes y testeos) para evitar que los jugadores sintomáticos salgan al campo. Si se implementan medidas para la satisfacción de las autoridades locales de salud pública se puede acordar (con ellos) qué nivel de EPP de protección es suficiente
    • En situaciones en las que no se puede mantener el distanciamiento recomendado por el gobierno, se recomienda una máscara quirúrgica
    • Cuando la prevalencia de COVID-19 es alta, tanto el personal como los jugadores tienen un mayor riesgo de exponer a otros o exponerse a personas infectadas
      1. Las Uniones, Competiciones y Clubes deben evaluar el cumplimiento de estas regulaciones de salud pública locales y/o gubernamentales, pero pueden usar el calculador de probabilidad de prevalencia para guiar su evaluación del riesgo a los efectos de informar sus decisiones de EPP.
    • El manejo de las vías respiratorias, como el uso de auxiliares de las vías respiratorias, o cualquier forma de ventilación mecánica son procedimientos que generan aerosoles y se debe tener especial cuidado para evitar la exposición del personal. En esta situación en la que la transmisión comunitaria es alta, las Uniones, Competiciones y Clubes deben considerar tener un miembro dedicado del equipo de atención inmediata listo para ponerse un EPP nivel 3 para trabajar con esto, cuando esto sea prácticamente posible,
    • El médico del equipo y el fisioterapista que tratan a un jugador inconsciente deben evaluar la respiración por las vías respiratorias y la circulación y mantener la estabilización en línea. Si el jugador requiere ser trasladado y/o manejo de las vías respiratorias esto debe realizarse por un miembro del equipo dedicado a la atención inmediata con EPP nivel 3.