Introducción

El manejo correcto de las heridas deportivas es importante para reducir al mínimo las tasas de infección y otras complicaciones. La necesidad de hacer retornar a un jugador al campo de juego lo antes posible, por ejemplo, dentro de la ventana de sangre de 15 minutos en el Rugby, añade más presión y puede limitar lo que puede lograrse en esa ventana de tiempo. Por lo tanto, se pueden emplear medidas temporales, por ejemplo, pegamento adhesivo para tejidos, que se puede quitar después del partido para permitir una mayor limpieza a fondo y la exploración de la herida antes del cierre definitivo.