Habilidades de movimiento de estabilidad

Las habilidades de movimiento de estabilidad forman la base de todas las otras habilidades locomotoras y de manipulación porque todo movimiento conlleva un elemento de estabilidad. Para apreciar la importancia de la estabilidad, podemos reflexionar rápidamente sobre el período reflejo temprano (infancia) en el que el niño tenía un centro muy estable (barriga) mientras creaba muchos y variados movimientos de agarrar, tirar y alcanzar con sus brazos y manos, y piernas y pies. Todos estos patrones y movimientos reflejos pueden considerarse un entrenamiento central. Desde su nacimiento, el bebé y el niño han estado entrenando y preparándose para el día en que serían desafiados con tareas físicas más exigentes.

Las habilidades de movimiento de estabilidad son aquellas en las que el foco está en adquirir y mantener un equilibrio estático y dinámico. El equilibrio estático se ve, por ejemplo, cuando el niño intenta mantener una posición de equilibrio sin moverse como si estuviera haciendo la prueba de equilibrio sobre una sola pierna. El equilibrio dinámico se ve, por ejemplo, en el movimiento de paso al costado que hace un niño para evadir a otro niño que se aproxima. En muchos deportes es extremadamente importante obtener o mantener el equilibrio y el equilibrio dinámico con frecuencia es más importante que el equilibrio estático en las destrezas del rugby. Tanto el equilibrio estático como el dinámico deben ser entrenados para producir un jugador completo. Los movimientos tales como alcanzar, dar la vuelta, girar, inclinarse y estirarse son habilidades fundamentales de estabilidad, como lo son levantar, transportar, empujar y tirar. En el rugby, la estabilidad y el equilibrio son cruciales en casi todos los aspectos del juego. Patear requiere un equilibrio en una pierna, eludir o esquivar tackles requiere un muy buen equilibrio dinámico y ajustar el cuerpo para hacer con éxito un tackle requiere estabilidad y equilibrio.

Algunas prácticas y ejercicios que se pueden utilizar para desarrollar habilidades de movimiento de estabilidad se muestran en los siguientes videos.

Equilibrio estático sobre una sola pierna: pedir al niño que se pare sobre una sola pierna y mantenga una postura estable y equilibrada durante 10 segundos. Repetir para cada pierna. Progresión: pedir al niño que alcance, agarre o toque varias partes del cuerpo mientras está en equilibrio.

Equilibrio estático en una sola pierna agarrando y lanzando: pedir al niño que se apoye sobre una pierna y mantenga una postura estable y equilibrada durante 10 segundos. Desafíe al niño pasándole una pelota y haciendo que la atrape y devuelva el pase. Repetir para cada pierna.

Roca inamovible: pedir al jugador que sostenga su peso sobre las manos y los pies. Luego mantener esta posición mientras otro niño intenta empujar o tirar de él.