Aprender a entrenarse
El objetivo principal en esta fase del modelo es aprender las destrezas generales del deporte (Canada Sport Institute, 2014). El rango de edad cronológica asociado con esta etapa es para los varones de 9 a 12 años y para las mujeres de 9 a 11 años. Según Balyi y Hamilton (2004) las destrezas deportivas especializadas se desarrollan desde los siete a los once años.
Uno de los períodos más importantes del desarrollo motor para niños está entre los 9 y los 12 años y esto se muestra en la figura de la ventana de oportunidades en la página anterior. Durante este tiempo, los niños tienen el desarrollo suficiente para adquirir destrezas deportivas generales que son la piedra angular de todo el desarrollo atlético (Balyi y Hamilton, 2004). La alfabetización física es un gran objetivo para esta etapa del modelo ya que el entrenador quiere que sus jugadores ganen confianza, competencia y motivación para disfrutar y jugar el deporte del rugby (Canada Sport Institute, 2014).
Esta etapa de desarrollo todavía está muy centrada en un enfoque basado en juegos para aprender las destrezas básicas del rugby y por lo tanto el desarrollo físico del jugador debe encajar en esto. Los niños a esta edad pueden no tener la concentración para completar un entrenamiento físico muy estructurado y formal por lo que la integración del entrenamiento de la capacidad física a los ejercicios y juegos de rugby es fundamental. La velocidad, agilidad, fuerza y flexibilidad son todas importantes capacidades físicas para el desempeño en el rugby y deben desarrollarse en esta etapa. Los ejercicios de entrada en calor y de vuelta a la calma son buenos momentos para completar parte del trabajo de esta capacidad física y luego, en la sesión principal de entrenamiento los juegos con pequeños equipos deben ser diseñados para permitir que el jugador desarrolle destrezas técnicas, tácticas y físicas.