Respiración con ventilación adecuada

La prioridad siguiente es evaluar la respiración del jugador. Es importante determinar la frecuencia respiratoria y verificar la igualdad de expansión de la pared torácica. Una palpación rápida de la pared torácica en este momento revelará cualquier área de dolor o de crepitación en las partes blandas. Es poco probable que un jugador sufra una lesión con amenaza inmediata de vida en la cancha pero si se identifica una dificultad respiratoria, será necesario realizar una evaluación más detallada.

Una evaluación más detallada de la respiración se realizará normalmente en la enfermería o en la ambulancia donde se realizará una inspección del tórax, frecuencia respiratoria, expansión, percusión, auscultación y examen de desviación traqueal o cianosis.

Las condiciones de amenaza de vida deben ser identificadas y de inmediato efectuarse un tratamiento adecuado si está capacitado para hacerlo, solicitar la ayuda apropiada o llevar al jugador lo antes posible a un centro de atención secundario adecuado. Esto se analiza en detalle en el capítulo “Respiración y Trauma de tórax”. Todos los jugadores con lesiones o enfermedades críticas deben recibir oxígeno en el ambiente prehospitalario a través de una máscara sin retorno (trauma) con alto flujo de oxígeno (10-15L/min).