Reducción del riesgo de lesiones en la entrada en calor

Recientemente se han realizado investigaciones que destacan el beneficio de incluir una entrada en calor con el foco en ejercicios que podrían reducir el riesgo de lesiones. Esto podría ser muy útil para el entrenamiento de jugadores juveniles de rugby, ya que los entrenadores podrían preparar el cuerpo para la sesión de entrenamiento inmediata y reducir con esta entrada en calor el riesgo de lesiones a largo plazo. La entrada en calor con el foco en la reducción del riesgo de lesiones, se centra en ejercicios de 4 categorías principales. La primera categoría es el entrenamiento del equilibrio y esta parte de la entrada en calor podría incluir ejercicios de equilibrio estático como pararse en una pierna y ejercicios de equilibrio más dinámicos, como saltar. Este entrenamiento del equilibrio le permitirá al jugador aprender a controlar su propio cuerpo y mantener el equilibrio en una variedad de posiciones que podrían ser útiles tanto para el rendimiento en el rugby como para la reducción del riesgo de lesiones. La segunda categoría es el entrenamiento de resistencia y esto se enfocará en ejercicios que buscan desarrollar la capacidad de los cuerpos para crear y controlar las fuerzas de la resistencia externa. Las áreas tales como la musculatura del muslo, el tronco, la musculatura de extremidades superiores y la musculatura del cuello deben ser enfocadas con ejercicios de resistencia en esta parte de la entrada en calor. Se podrían incluir ejercicios tales como estocadas, elevación de hombros con resistencia y flexiones de brazos para preparar el cuerpo para el entrenamiento y reducir el riesgo de lesiones. La tercera categoría la constituyen ejercicios de salto y aterrizaje en los que el jugador aprenderá a controlar las fuerzas al aterrizar y a producir fuerzas al saltar. Esto será beneficioso para enseñar a los jugadores a controlar y absorber muchas de las fuerzas que experimentarán en el partido de rugby. Finalmente, la cuarta categoría analiza ejercicios basados en cortarse y en la agilidad con retroalimentación del preparador físico sobre la posición del cuerpo y la ejecución del ejercicio. Esto replica una destreza muy útil en el rugby y, por lo tanto, está preparando al jugador para las demandas del rugby mientras le permite practicar el control y el desarrollo de las fuerzas asociadas con esos movimientos. Los estudios de investigación que analizan este tipo de entrada en calor con reducción del riesgo de lesiones usando ejercicios de estas 4 categorías mostraron algunos resultados positivos. Los estudios encontraron que los jugadores que se sometieron a la entrada en calor con reducción del riesgo de lesiones tuvieron una menor incidencia de lesiones en el transcurso de la temporada en comparación con los jugadores que realizaron una entrada en calor más tradicional, compuesta de elevación de la temperatura corporal y luego estiramiento dinámico y trabajos de movilidad. Estos son resultados alentadores, pero los estudios tuvieron algunos problemas. Uno de los más apremiantes fue que hubo una falta de retroalimentación y coaching durante la entrada en calor más tradicional en comparación con la entrada en calor con reducción del riesgo de lesiones. Esto podría significar que fue la falta de coaching de los deportistas lo que causó la diferencia en los resultados de incidencia de lesiones en lugar de los ejercicios y la estructura de cada protocolo de entrada en calor. Esta investigación proporciona algunos datos interesantes y valiosos. Tal vez el preparador físico podría incluir ejercicios de las 4 categorías mencionadas en un diseño de entrada en calor más tradicional y aún así obtener el beneficio de la reducción del riesgo de lesiones. Es un área de investigación alentadora ya que la preparación para el rendimiento físico y la reducción del riesgo de lesiones son las dos áreas principales en la preparación física de jugadores para el rugby.